En mayo de este año Olaplex – que recientemente ha ganado una millonaria demanda contra L’Oreal por infracción de patentes – había demandado a Walmart por vender imitaciones no autorizadas de sus productos, incluyendo el popular Hair Perfector No. 3.
Ahora, Walmart ha respondido a la demanda negando tener conocimiento de la “distribución y venta intencional” de productos falsificados para el cuidado del cabello, y oponiéndose fervientemente al reclamo de que sus tiendas están “plagadas de falsificaciones”.
Con esto en mente, Walmart afirma que el caso de Olaplex debería ser anulado en su totalidad y la marca no debería recibir ningún tipo de compensación.
Además, parte de la defensa de la cadena de supermercados se basa en la Doctrina de la Primera Venta, un principio legal que protege al comprador de un artículo genuino con marca registrada de una infracción o responsabilidad de dilución si este opta por revender ese artículo.
Esto significa que una vez que el titular de una marca ha lanzado productos al mercado, su capacidad para controlar cualquier distribución posterior disminuye en gran medida.
Al usar esta defensa, Walmart estaría esencialmente diciendo que los productos Olaplex en su mercado, incluyendo los supuestos productos falsos, son productos auténticos que Olaplex lanzó al mercado a otros compradores, y por lo tanto no puede evitar la reventa de esos bienes por parte de sus compradores iniciales.
Sin embargo, la demanda de Olaplex alega que los productos estaban siendo vendidos por terceros – en el mismo sitio de Walmart –, pero también por la misma compañía, por lo que las cosas podría dificultarse mucho para el minorista.