Según medios internacionales, en el marco de la operación «Fictor», la Guardia Civil de Valladolid, España, incautó más de 140 cajas de botellas de vino de la bodega Denominación de Origen (DO) Rueda con contraetiquetas presuntamente falsificadas. Luego se detuvo a la propietaria de la bodega vecina de Rueda, por el supuesto delito de falsificación de certificados -penado con entre uno y cuatro años de prisión- y otro contra la Propiedad Industrial -que podría conllevar una pena similar-.
Ahora se investiga si este producto llegó al extranjero después de haberse detectado, además de en Castilla y León, en las comunidades de Asturias y Cantabria. Asimismo, se solicitó un análisis del contenido para corroborar su calidad y condiciones, aunque se considera «poco probable» que pudiera ser perjudicial para la salud.
Los detalles de la operación los han presentado este lunes el subdelegado del Gobierno en Valladolid, Emilio Álvarez; el teniente coronel de la Comandancia de la Guardia Civil de Valladolid, Javier Peña; y el director de la Denominación de Origen Rueda, Santiago Mora.
La investigación arranca con la denuncia interpuesta el 18 de julio de 2019 por el director general del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Rueda, en la que se pone en conocimiento supuestas irregularidades en la contraetiqueta de ciertas botellas, de una Bodega perteneciente al Consejo Regulador de la Denominación de Origen.
Consistía en el contraetiquetado del vino elaborado en el 2018 con numeraciones correspondientes a vino cosechado el año 2017, infracción regulada por la Denominación, pero que motivó la investigación de la Guardia Civil.
Una vez detectadas estas irregularidades, se llevó a cabo un minucioso estudio tanto de la producción como de la comercialización de las marcas que elabora la bodega investigada, con el fin de localizar aquellas botellas cuya contraetiqueta tenga visos de estar falsificada atendiendo a las directrices que marca Rueda.
Una vez realizado el estudio de las contraetiquetas se desprende que las etiquetas no corresponden a los parámetros que la Denominación de Origen Rueda marca en sus etiquetas y las mismas no han sido distribuidas por ellos, ya que éstas se imprimen exclusivamente en dos empresas y además cuentan con un sello único en España con un relieve especial que se implementó hace algo más de un año como medida de seguridad.
En Asturias y Cantabria fueron detectadas tres distribuidoras que, sin tener conocimiento de las irregularidades, habían distribuido, al menos 50 botellas con etiquetas falsificadas, y se inmovilizan 60 cajas antes de ser puestas en mercado.
La Guardia Civil comprobó que las contraetiquetas de estos 60 lotes no han sido certificadas por la DO Rueda y que las imprentas que las emiten no las han emitido.
La detenida, después de prestar declaración ante la Guardia Civil, como presunta autora de un delito de falsificación de certificados y contra la propiedad industrial, quedó en libertad pero a disposición del Juzgado de Instrucción de Medina del Campo.