Un «provocador». Así es definido Robert Hovden, un profesor de física que solicitó y obtuvo los derechos de autor de un mazo del famoso Magic: The Gathering (MTG), el juego de cartas coleccionables más popular del mundo.
Hovden obtuvo los derechos de autor del mazo que tituló «Angels and Demons» (Ángeles y demonios), una creación de su autoría, pero basada, indudablemente, en los productos creados y vendidos por la empresa Wizards of the Coast (WotC), propiedad de Hasbro.
Magic: The Gathering cuenta con más de 25 de años de historia y hoy vive un excelente presente, gracias, en gran parte, a un salto de calidad de su oferta digital con el aún reciente lanzamiento del videojuego Magic: The Gathering Arena (MTGA).
Cada año, WotC suma miles de nuevas cartas al entorno de MTG, que se juega en múltiples diferentes formatos, cada uno con torneos, oficiales y no oficiales. Los jugadores crean sus mazos utilizando las miles -en algunos casos, decenas de miles- de opciones de cartas disponibles, según el formato en cuestión.
Es muy común, más hoy en día con el desarrollo de Internet y la popularidad del juego gratuito online MTGA, que los jugadores copien los mazos creados por otros. Es un sistema que se conoce como «netdecking» -tomar el mazo o «deck» de la red o «net»- para utilizarlo como propio, incluso en torneos competitivos.
No es algo que WotC desaliente y, pese a que existe la idea que no es tan valorable como crear un mazo original, el «netdecking» es tan común que todas las páginas especializadas alimentan una base de datos con los mazos más jugados, ya sea por profesionales o creadores de contenido en las redes sociales.
Hovden, sin embargo, ha insinuado públicamente que podría prohibir que otros usen «Angels and Demons’ en torneos, algo que jamás ocurrió previamente. Es muy común, de hecho, que los torneos vean únicamente poca variedad de mazos, con muchos de los competidores jugando prácticamente la mismas listas de cartas.
Según analiza el periodista y autor Cory Doctorow, especialista en materia de derechos de autos, los pasos tomados por Hovden «podrían provocar una estampida para registrar los derechos de autor en los mazos de MTG y sacar los mejores mazos del juego».
Havden es, como afirma Doctorow, un «provocador». Sus acciones suelen intentar poner bajo la luz fallas en el sistema de propiedad intelectual de EEUU. Es improbable que realmente prohíba utilizar su mazo -de calidad desconocida- en torneos; su objetivo es apuntar que este tipo de situación no debería darse.
«De hecho, esta es una pregunta retorcida sobre la ética, la mecánica y los aspectos prácticos de la ley de derechos de autor de EEUU», opina Doctorow.
Fuente: Pluralistic.net