Luego de una fuerte polémica sobre las patentes farmacéuticas, la denominada «cláusula Bolar» que buscaba ser incluida en la nueva Ley Federal de Propiedad Industrial, el senado mexicano ha logrado un acuerdo para avanzar en una ley clave ante la entrada en vigor, el 1º de julio, del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
La polémica se basaba en la potencial inclusión a último momento de una iniciativa que extendía las patentes farmacéuticas dificultando el acceso a la misma hasta los últimos años de su vigencia, lo que, según sus opositores, favorecía ampliamente a las empresas transnacionales en demérito de las nacionales y, en particular, del consumidor mexicano, al postergar la fabricación de versiones genéricas, usualmente mucho más baratas, de los fármacos.
Las comisiones del Senado tuvieron una larga jornada de domingo buscando sacar adelante esta nueva Ley Federal de Protección a la Innovación Industrial, la que junto a otras cuatro busca entrar en vigor antes del 1º de julio, puesta en marcha del T-MEC. El esfuerzo parecía destinado al fracaso, pero tras varias horas de negociaciones, los representantes del gobierno y la oposición llegaron a un acuerdo.
Las partes acordaron eliminar la posibilidad de inclusiones de último momento a la ley, lo que abría las puerta para la modificación a las patentes farmacéuticas, y acordaron sesionar hoy lunes y mañana martes para finalizar con la aprobación de las leyes en cuestión.
Las modificaciones acordadas tuvieron que ver con el artículo 57, fracción II, que establecía que toda comercialización de medicamentos a los que hace referencia el artículo anterior estará prohibida mientras la patente correspondiente se encuentre vigente.
Según señala la página del Senado, en este artículo se mantiene el texto que plantea que el derecho que confiere una patente no producirá efecto alguno contra: «Un tercero que use, fabrique, ofrezca en venta o importe un producto con una patente vigente exclusivamente para generar pruebas, información y producción experimental necesarias para la obtención de registros sanitarios de medicamentos para la salud humana».
Buscando evitar la revalidación de las patentes farmacéuticas mediante el «segundo uso» (aplicar el mismo medicamento a una nueva enfermedad), el Senado decidió suprimir del dictamen la adición del texto a la fracción IX del artículo 47, que planteaba que no se considerarán invenciones, en particular «la variación de uso, de forma, de dimensiones o de materiales de invenciones conocidas, salvo que esta variación implique un resultado industrial o un uso no obvio para un técnico en la materia».
También se precisó que el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) publicará, cuando menos semestralmente, un listado de patentes relacionadas con invenciones susceptibles de ser empleadas en medicamentos alopáticos.
El proyecto para expedir la nueva Ley consta de 410 artículos, distribuidos en siete títulos. Además cuenta con 18 artículos transitorios para su correcta implementación y entrada en vigor.
«Logramos modificaciones, tanto en patentes como en sistemas de vinculación, en la ‘cláusula Bolar’. Buscamos no desestimar a la industria multinacional, respetando su derecho de patentes de 20 años de promedio, pero también dar un equilibro a la liberación exacta para la fabricación de medicamentos genéricos, que son mucho más barato y benefician al sector social», explicó Miguel Ángel Navarro, senador del partido de gobierno, Morena, y presidente de la Comisión de Salud, a El Heraldo de México.
«En ese sentido la ‘cláusula bolar’ ya no tiene limitaciones, es atemporal, a la par que se inicien los trabajos para un medicamento genérico y, al día siguiente de que se cumpla el periodo de una patente, puede comenzarse a comercializar el medicamento genérico».
Fuente: Senado de México