Es que Primal Palate había lanzado al mercado un condimento llamado New Bae, el cual según McCormick buscaba capitalizarse de la creación de una asociación ilícita con Old Bay y, como consecuencia, dañar su reputación.
En la demanda, la compañía exigía que todas las ganancias de las ventas de New Bae se pagaran a McCormick y que se destruyeran todos los productos, mercancías o registros que llevaran ese nombre.
Si embargo, antes de que las partes aparecieran en la corte, un juez federal de los Estados Unidos desestimó la demanda después de que se le informara al tribunal que se llegó a un acuerdo de forma privada entre las partes.
De momento, ninguna de las partes comentó sobre la resolución, pero previo a la noticia Primal Palate había declarado en Instagram que pensaba pelear la demanda y que su mezcla era “un guiño a Old Bay, ya que siempre nos esforzamos por ofrecer opciones orgánicas y saludables para nuestro público, y proporcionar una transparencia total con los ingredientes.
“No vemos ningún mérito en sus afirmaciones, ya que creemos que está lejos de confundir a los clientes, y nuestras mezclas también son muy diferentes. De hecho, la forma en que lo nombramos tenía la intención de diferenciarlo, sin mencionar que ni siquiera sabemos cuáles son los ingredientes en Old Bay.”