Una diseñadora australiana, de nombre Katie Jane Taylor (antes Katie Perry), está en una dura batalla legal contra la artista Katheryn Elizabeth Hudson, más conocida como Katy Perry.
La batalla de las Katys Perrys comenzó en 2009, cuando la artista envió lo que la diseñadora y s equipo legal consideran «amenazas de mano dura» para que desistiera de continuar utilizando la marca que Taylor, apellido que tomó de su esposo, había fundado en 2007.
Los abogados de Taylor aseguran que Perry no era conocida por la diseñadora hasta 2008 y que las primeras cartas recibidas fueron un «shock significativo» para ella.
Taylor inició una demanda en 2013 acusando a Perry de infracción marcaria por vender productos con una marca «substancialmente idéntica o engañosamente similar» a la suya. Perry, por su parte, contratacó con el objetivo de cancelar el registro de marca que posee la diseñadora.
Kathy Perry, quien adoptó ese nombre artístico en 2004, visitó Australia en 2014 y 2018 realizando conciertos. y aún antes de eso ya se vendía ropa de su línea en diferentes tiendas del país.
Los abogados de la artista niegan que Perry haya violado los derechos de la diseñadora al utilizar una marca similar, dado que se trata de su nombre artístico y fueron acciones llevadas adelante en buena fe.
Los abogados de la artista también aseguran que la popularidad internacional de la cantante precede a la formación de la marca de la diseñadora, argumentando que cuando Taylor registró su marca, ya existía la web propia de Kathy Perry, donde se podían comprar múltiples artículos.
El caso continuará esta semana en Australia, con testigos de ambas partes. No se espera la presencia de Kathy Perry, pero si estará su manager, Steven Jensen.