Como uno de los principales servicios de CDN y de protección frente a ataques DDoS, Cloudflare es utilizado por cientos de sitios web alrededor del mundo, incluyendo en muchas ocasiones, una variedad de sitios piratas.
Y desde hace mucho tiempo, la industria del entretenimiento se ha quejado de la relación entre estos servicios y las páginas piratas, argumentando que a pesar de saber que esas webs estaban ofreciendo contenido ilegal, no hacían nada por evitarlo.
Ahora, la operadora italiana RTI, parte de Mediaset, ha demandado a Cloudflare por prestar servicios a varios sitios piratas que ofrecían sus programas de televisión de forma ilegal y gratuita.
El argumento fue que Cloudflare podría considerarse, entre otras cosas, como un servicio de alojamiento bajo la directiva de comercio electrónico (Directiva 2000/31/CE) y, dado que conocía la ilegalidad de los sitios y no objetó, podría ser considerado responsable del crimen.
Por su pare, Cloudflare objetó, explicando que el tribunal italiano no tenía jurisdicción sobre el negocio de una empresa americana, y que la directiva de comercio electrónico no se aplicaba a las empresas extranjeras, pero esas objeciones fueron rechazadas.
En una sentencia dictada por el Tribunal de Comercio de Roma a fines del mes pasado, Cloudflare recibió la orden de cancelar de inmediato las cuentas de los sitios piratas en disputa, teniendo también que compartir los datos personales de los propietarios del sitio y sus compañías de alojamiento con RTI.
Si Cloudflare no cumple con cualquiera de los requisitos deberá pagar una multa de 1.000 euros por cada día que continúen las infracciones.
El fallo del Tribunal de Roma no puede ser apelado y genera un precedente interesante para todos los servicios de alojamiento o servicios digitales relacionados con webs pirata, que bien podrían ser considerados como responsables del crimen por no tomar acciones al respecto.